“El Espíritu del Señor esta sobre mí, porque me ha ungido para anunciar a los pobres la Buena Nueva, me ha enviado a proclamar la liberación a los cautivos y la vista a los ciegos, para dar la libertad a los oprimidos y proclamar un año de gracia del Señor.” (Lucas 4:18)
Esta cita bíblica ilumina e impulsa la Misión de todos los miembros de la Familia Vicentina en el mundo.
MISIONES
La misión es la primera acción en la que se basa la evangelización, la misma que está destinada a aquellos que no conocen el Evangelio, y que se lo anuncia para alcanzar la salvación. Esta acción misionera involucra a todos los cristianos por el hecho de haber recibido el Bautismo.
Existen diferentes carismas y ministerios específicos en los que se puede llegar con el anuncio de la Buena Noticia; sin embargo, es necesario destacar con el firme convencimiento de que: “allí donde hay un cristiano, también hay un testigo del Evangelio que, con su vida y su palabra, lo transmite a quien no cree”, y, de esta manera, todo bautizado debe sentirse portador de la misión de la Iglesia, en medio del mundo y para el mundo. Ante diversas situaciones que atravesamos en la actualidad, época de muchos cambios a nivel mundial, marcado por profunda indiferencia, pérdida de participación en la vida sacramental, evidente dicotomía en la praxis moral, se hace indispensable retomar la comunión con Cristo y con todos los hermanos de la Familia Vicentina, para que iluminados por la fuerza del Espíritu Divino, quien es fundamento de la misión, continuemos en el camino de salvación, acudiendo en la Semana Santa.
La fe no es transformación intelectual, sino conversión a un Evangelio que se manifiesta en frutos de justicia y que renueva la faz de la tierra, en espera del “cielo nuevo y tierra nueva”. Nuestra vida como cristianos es muy significativa y trascendental al anunciar el Evangelio, allí donde se encuentra, por el sólo hecho de estar en contacto con nuestros hermanos empobrecidos, por iluminación de la Palabra, fundamento de vida y verdad.
"Jesús invita a todos a participar de la Misión. ¡Que nadie se quede de brazos cruzados! Ser misionero es ser anunciador de Jesucristo con creatividad y audacia en todos los lugares donde el Evangelio no ha sido suficientemente anunciado o acogido, en especial, en los lugares difíciles y olvidados, y más allá de nuestras fronteras". De esta manera, encontraremos la cercanía con nuestro Salvador, quien nos otorgará su gracia y bendiciones. Por los siglos de los siglos.
MISIÓN VICENTINA DE SEMANA SANTA 2022
MISIÓN VICENTINA DE SEMANA SANTA:
Reencuentro con nuestro Señor Jesucristo, comprometidos en todo momento a comunicar y enseñar a dar testimonio de su grandeza a los “más pobres de los pobres”. Aprendiendo a escucharles, a valorarles, puesto que, así sentiremos la presencia del Señor, quien nos donará como tarea, la transformación santificadora del mundo, para que en él se instaure el Reino de nuestro Benignísimo Dios.
“Recibirán la fuerza del Espíritu Santo que vendrá sobre ustedes, y serán mis testigos…hasta los confines de la tierra” (Hechos 1:8).